En un cambio histórico, Riot Games ha anunciado oficialmente que las casas de apuestas podrán patrocinar equipos de VALORANT y League of Legends a partir de 2025. Esta medida representa un giro respecto a la postura tradicionalmente cautelosa de Riot sobre asociaciones relacionadas con el juego, y podría marcar el inicio de una fase transformadora en los esports competitivos.

Implementación Controlada en EMEA y las Américas
La nueva política de Riot se aplica actualmente a equipos de esports con sede en EMEA y las Américas, otorgando luz verde a colaboraciones con plataformas de apuestas, aunque dentro de un marco estrictamente regulado.
Esta evolución fue inicialmente especulada en redes sociales por el excomentarista MonteCristo y posteriormente confirmada por el COO de Esports de Riot, Whalen Rozelle. Él explicó el enfoque cauteloso pero optimista de Riot, subrayando que la iniciativa se introduce bajo restricciones claras diseñadas para proteger la integridad competitiva.
Nuevos Ingresos Frente a los Retos de los Esports
La inclusión de patrocinadores de apuestas representa una nueva fuente de ingresos para las organizaciones de esports, muchas de las cuales han enfrentado desafíos de sostenibilidad. Con la industria global de los esports bajo presión para lograr una base financiera sólida, esta decisión podría apoyar significativamente la operación de los equipos y su viabilidad a largo plazo.
Directrices Estrictas para los Patrocinadores de Apuestas
Aunque se abre a los patrocinadores de apuestas, Riot implementará fuertes salvaguardas. Todos los socios de apuestas deberán contar con licencia completa en sus respectivas regiones y cumplir tanto con los requisitos regulatorios como con los estándares internos de Riot para la conducta de patrocinio.
Algunas limitaciones importantes incluyen:
- No se permitirán logotipos de casas de apuestas en las camisetas de los equipos.
- No se permitirá publicidad ni promociones relacionadas con casas de apuestas en transmisiones o contenido oficial de Riot.
Esto deja a los equipos con el reto de construir asociaciones valiosas sin sobrepasar estos límites promocionales, asegurando que Riot mantenga el control sobre cómo se representan públicamente estas relaciones.
Filosofía de Riot: Riesgo Medido y Proceso de Aprendizaje
Rozelle enfatizó que Riot no se está lanzando precipitadamente al mundo de las apuestas. “Evaluaremos y adaptaremos”, afirmó, reconociendo que se trata de un período de aprendizaje. Dependiendo del desempeño de la política, Riot podría expandirla o ajustarla en el futuro.
Esta estrategia incremental indica que Riot está comprometido a preservar la integridad y la experiencia del aficionado que han definido su ecosistema de esports, especialmente considerando su audiencia global, joven y diversa.
Código de Conducta y Medidas Anticorrupción Reforzadas
Para acompañar este cambio de política, Riot también ha actualizado su Código Global de Conducta de Esports. Las revisiones abordan riesgos emergentes como el amaño de partidas, el abuso de apuestas y el uso indebido de información privilegiada.
De forma significativa, las nuevas directrices responsabilizan a los profesionales de los esports no solo por sus propias acciones, sino también por la conducta de asociados que actúen en su nombre. Este cambio busca cerrar brechas legales y desalentar formas indirectas de corrupción.
Mirando al Futuro
La política de patrocinio de apuestas de Riot para 2025 refleja un intento estratégico de equilibrar la innovación financiera con la equidad competitiva. Al establecer restricciones claras y hacer cumplir la rendición de cuentas, la compañía da un paso medido hacia un ámbito controvertido — uno que seguramente será observado de cerca por jugadores, aficionados, reguladores y otros desarrolladores.
Aún está por verse cómo afectará esta decisión al ecosistema de los esports, pero sin duda representa un cambio crucial en el enfoque de Riot respecto a la monetización y los patrocinios en sus títulos más importantes.